Se necesitan mujeres para frenar la despoblación rural
Puede parecer el título de un anuncio de clasificados pero en realidad es una llamada de atención sobre el papel clave que juega la mujer en el reto de evitar la pérdida de población en las zonas rurales.

El 58% del turismo rural tiene cara de mujer, ya que son ellas las que regentan más de la mitad de las casas rurales y agroturismos de España y gracias a este tipo de actividades, la economía de los pueblos se diversifica y recibe un impulso que acaba beneficiando al conjunto de la zona.
La posibilidad de vivir en el campo y de fijar residencia en un entorno rural genera un impacto económico -pendiente aún de medición- en áreas que hasta ahora sufrían una pérdida paulatina de población sin solución aparente.
La empleabilidad de las mujeres rurales y la renovación de la economía rural, “son muy importantes para detener el despoblamiento galopante”, según Teresa López, presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (FADEMUR) .
Esta opinión es compartida por el 39% de los propietarios de alojamientos rurales y por el 50% de los viajeros, según el Observatorio de Turismo Rural.
Son reflexiones que se han escuchado estos días en el marco de la Feria Internacional de Turismo (FITUR) y pensamos que hace falta que se escuchen más a menudo para crear una conciencia que ayude a las mujeres a situarse al frente de este reto para el que necesitan el apoyo de las administraciones y del conjunto de la sociedad.
Además, y teniendo en cuenta que el turismo rural “es el único que cumple con las tres patas de la sostenibilidad”, parece que ha llegado el momento de que sea reconocido el papel clave de las mujeres para conseguir objetivos que trascienden lo familiar y lo local.